Så sent her? [Privado]

Annker camina, camina por lo más oscuro de las calles. Como siempre, anda sin rumbo, más que nada porque no tiene un lugar muy fijo al cual llegar, y siempre con su guitarra a cuestas.
Es noche de brujas, pero como no es supersticioso le da igual.

Salta sobre una banca que había al frente, luego salta a la otra, con la agilidad de un gato... Desde cuándo podía hacer eso? Bueno, no interesa. Sigue saltando de banca en banca como si nada. Mira hacia un lado y ve un cementerio. Salta de la banca al piso y luego salta a la pared no tan alta que delimita el cementerio. La recorre con un equilibrio totalmente felino, pero no le da mucha importancia.

Se detiene cerca de un árbol que está fuera del cementerio, pero lo bastante cerca para creer que está dentro. Se sienta en el muro a mirar los alrededores, a ver si alguna de las supersticiones del día de brujas aciertan.

Divisa a una persona, recorre el muro nuevamente hasta quedar cerca de ella, en silencio se sienta y la observa.

Sus pies casi no tocaban el suelo, pero no denotaba en ese detalle. Se sentia ligera como una pluma, y el atuendo que llevaba ayudaba a ello. Un simple camison de color rosado que le tapaca casi con dificultad sus partes bajas. Eso era de lo unico diferente de lo que se había dado cuenta esta mañana. No había denotado en que su cabellos se habian tornado rosados o de que tenia unas pequeñas alas a la espalda y un halo sobre la cabeza.

Andaba medio hipnotizada por las calles, intentaba averiguar de donde salian todos aquellos lamentos que oia. Asi que sin saber muy bien como, estaba andando por la calle que llevaba al cementerio, acariciando con una mano el muro mientras andaba. Se detuvo en la puerta teniendo la sensacion de que era observada por alguien. Miro a ambos lados de la calle pero seguia sin ver a nadie-¿Hay alguien ahi?-se artevio a preguntar en voz baja, pero lo suficientemente alto como para que fuera oido

Ja - Respondió al llamado, con tono sereno. Apenas si reconocía quién era. - Te ves algo diferente, Nino. - Dijo ladeando la cabeza sin darse cuenta. Su cola, que tenía ya desde hace un rato, se movía de un lado a otro. Saltó ligeramente del muro y se puso en frente de ella. - Så sent her? - Murmuró, examinándola detenidamente sin él darse cuenta. Sus orejas de gato apuntaban hacia el cementerio por un ligero murmullo.

Guiada por la voz giro la cabeza hacia el muro para ver a una ¿persona? ¿o era un gato? Parecia una mezcla de los dos y lo peor es que quella cosa extraña la conocia. Puedo examinarlo mejor cuando bajo del muro y se puso delante suya-¿Annker?-Pregunto tras mucho pensar y recordarle-Tu eres quien te ves diferente-dijo mientras le examinaba aquellas orejas. ¿Por que se había disfrazado, no tenia ni idea

-Solo seguia unas voces, y llegue aqui-señalo hacia dentro del cementerio. No queria decirlo, pero le daba miedo el entrar sola. No se atrevia a preguntarle si queria entrar con ella. Pero en cuanto se fuera, entraria ella sola.

-Hehe, yo estoy igual - Rió sin sonreir, retrocediendo dos pasos - Bueno, dejémoslo así, ambos estamos iguales. - Miró de reojo hacia el cementerio, sus orejas ya apuntaban notoriamente hacia allá. - Hmm~... Que molesto ese murmullo, eh? - Dijo en tono algo burlón pero sin sonreír.

Dió dos pasos hacia el cementerio y miró a Nino. - Quieres acompañarme a investigar un poco? Me tienen harto esos estúpidos murmullos, en serio... - Su cola se movió de un lado a otro en señal de molestia.

Le miro sorprendido, sobre todo porque pudiera oir aquel murmullo, aunque para ella eran más lamentos que otra cosa. Aunque tambien se sorprendio de que ella misma pudiera oirlos.-Investiguemos-Se adelanto y abrio con cuidado la puerta del cementerio, que cedio con un chirrido que le hizo daño en los oidos.

Dio unos pocos pasos pero no fue capaz de andar más alla, el ruido iba en aumento y en un momento determinado tuvo que taparse los oidos. Se giro para mirar a Annker y casi con la mirada le pidio que por favor se mantuviera a su lado. Empezo a pensar en como calmarlos y de repente tuvo una inspiracion divina-Toca "esa" cancion, por favor. Tal vez asi puedan callarse

El chirrido de la puerta le molestó de sobremanera, pero la siguió por detrás. Más adelante los murmullos eran cada vez más fuertes, hizo una mueca de molestia, pero avanzó junto a Nino. Al verla detenerse, se detuvo él también. La miró con ojos sonrientes, aún sin cambiar la expresión de sus labios que era seria como nunca.

Sonrió al fin cuando propuso lo de la canción. Tomó su guitarra que llevaba en la espalda y la afinó. - Godt, aquí voy - Empezó a tocar la canción que Nino le pidió. Para él era muy fácil, siempre la tocaba y no la iba a dejar de tocar jamás, claro que para cualquiera era algo complicada ya que los acordes habían sido sacados por oído y no eran los comunes.

La música amansaba a las fieras y en este caso, a aquellos lamentos, que iban disminuyendo hasta casi desaparecer. Se le quedo observando en silencio, escuchandole tocar. En verdad se veia muy sexy asi, sobre todo con aquellas orejas sobresaliendole en la cabeza. Los lamentos iban desapareciendo totalmente o por lo menos, eso es lo que ella notaba, ya que estaba demasiado concentrada en la música...

Hasta que un grito hizo que se desconcentrara de la música. Pero no era solo un grito, eran más, mucho más, y le taladraban la cabeza. Calló al suelo y se intento tapar los odios, pero le era imposible el dejar de oir aquellos gritos incesantes. Pequeñas lagrimas e empezaban a formar en sus ojos. Debia haberse quedado en casa, seguramente no tendria que pasar por este sufrimiento.